El mismo viernes de la fiesta, se desarrollaron las calderetas en la fábrica, dónde nos reunimos aproximadamente unas 400 personas, a la rica caldereta de patatas con carne. Fue una noche de encuentros y reencuentros, ya que mucha gente solo se ve de un año para otro, y es una excusa y pretexto esta cena para acudir al pueblo y juntarse con familia, amigos, etc.
Como tradición que es, esperamos que siga perdurando año tras año, y sea un nexo de unión y armonía entre los habitantes y visitantes de Matute.
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